lunes, 26 de noviembre de 2012

Es imposible no recordar tiempos mejores.

Nudo en la garganta, como siempre. Esa canción que algún día me hizo sentir el cielo ahora me acribilla a preguntas sin respuesta que si me esfuerzo en responder acaban acompañadas de lágrimas y dolor. Podría dejar de escucharla, pero este dolor calma. Ni siquiera sé si es posible, pero a mí me serena.

El problema es que te has convertido en esa canción. Resuena en mi cabeza una y otra vez. Se ha convertido en la banda sonora de mi vida, y no puedo hacer nada para cambiarla por otra. Sus notas siguen dentro de mí, tú también. Algo así como la gravedad, ¿quién es el valiente que osa enfrentarse a ella? Por eso yo caigo otra vez, como si se tratase de un círculo vicioso. Me caigo dentro de ti y ya no hay quién me saque.

¿Recordar tiempos mejores? Reacciono y me doy cuenta de que nunca realmente existieron.

“I don't wanna fall another moment into your gravity”